10 obras fundamentales para adentrarse en el género policial

Platiqué con un amigo sobre mis gustos literarios y salió el tema de la literatura policial (o policiaca, da igual). Me preguntó con qué obras podría iniciarse en el género. Pensé que sería algo más complicado, pero tengo una lista de las obras fundamentales para que cualquiera inicie con la literatura de crímenes e investigaciones.

Espero les agrade.

1. “Los asesinatos de la calle Morgue”. El cuento que muchos críticos consideran el inicio del género, por Edgar Allan Poe. Un clásico que brinda la figura del detective aficionado en el contexto urbano.

2. El sabueso de los Baskerville. Una de las cuatro novelas protagonizadas por el inmortal Sherlock Holmes. Excelente obra de Sir Arthur Conan Doyle sin duda.

3. El asesinato de Roger Ackroyd. Agatha Christie le da una vuelta de tuerca al género. Uno de los finales más sorpresivos para la historia de la literatura policial clásica.

4. Asesinato en el Orient Express. Ésta junto con la anterior son dos grandes novelas con el detective belga Hércules Poirot como protagonista.

5. Cosecha Roja. El gran cambio en el género empieza con esta gran obra de Dashiell Hammett. La violencia inunda las calles de Poisonville y un detective la utiliza a su favor.

6. El halcón maltés. Sam Spade decide encontrar al asesino de su compañero, mientras tres criminales luchan por encontrar una valiosa estatuilla. Inmortalizada en el cine con Humphrey Bogart en el rol principal se trata de otra gran obra de Hammett.

7. El largo adiós. Phillip Marlowe, uno de los más grandes detectives de la historia de la literatura, protagoniza una novela donde el pasado tarda en irse.

8. La dalia negra. La prosa dura como golpe de marro de James Elroy inmiscuye al lector en uno de los asesinatos más controversiales en la historia del crimen.

9. El complot mongol. El género negro viaja a México. Rafael Bernal muestra la violencia en la ciudad después de la revolución.

10. Cosa fácil. Paco Ignacio Taibo II, gran promotor del género policial, da una peculiar mirada al crimen en la Ciudad de México. Buena elección para conocer a Héctor Belascoarán Shayne, detective mexicano independiente.

Espero que esta lista de obras les agrade a todos aquellos que quieran comenzar a leer el género. Sin duda, la cantidad de obras policiales que existen es abrumadora, pero éstas les servirán como una guía.

Con gusto contestaré cualquier petición o duda que tengan. ¡A leer se ha dicho!

Cómo realizar las lecturas para tu clase de literatura y no morir en el intento.

Escena típica en el salón de clases: el profesor de literatura dice en voz alta, cuando ha sonado el timbre: “–¡Recuerden que el examen de lectura es el día de mañana! ¡Por favor no olviden traer su libro y sus fichas de resumen!”. “Dios me ayude”, piensas: no has leído nada. Recuerdas que en algún momento tu madre te mostró el libro, ella lo había comprado, pero éste se dedicó durante todo el mes a recoger el polvo de tu escritorio. ¡Incluso tiene todavía el plástico! Ahora te encuentras con un gran problema, pues para tener derecho al examen teórico necesitas pasar tu examen de lectura. ¡Y la novela es de 350 páginas! Haces cuentas, y piensas que, si lees a un ritmo de 70 páginas por hora, podrías acabar cerca de las 8 de la noche, ¿cierto? No obstante, dan las 8 y tú no has llegado ni a la mitad. Estás perdido, seguramente no pasarás el examen de mañana y reprobarás el bimestre.

Lo anterior no tiene que ocurrir. Con las herramientas correctas, organización, constancia y, sobre todo, paciencia, puedes terminar tus lecturas a tiempo. Es más, ¡incluso podrías llegar a disfrutarlas! Dicho lo anterior, te explico cómo realizar las lecturas para tu clase de literatura y no morir en el intento.


1. Consigue el texto.

Suena bastante obvio pero es muy importante. Muchos estudiantes no terminan sus lecturas porque no consiguen ese libro que su maestro les ha dicho que deben de comprar cuanto antes. En cuanto el profesor te diga que te hagas con el libro, obtenlo. Cuánto más tiempo dejes pasar, te será más difícil terminarlo.

Ya que tengas el texto, hojéalo. Date una idea de qué trata y cuántas páginas tiene. No tengas miedo si te das cuenta que es una novela de 700 páginas. Con organización y dedicación, la terminarás sin problemas.

2. Determina cuánto tiempo tienes para leerlo.

Consulta la fecha que te ha dado el profesor para el examen. Si no la tienes aún, pide que te la de (siempre de manera educada, por favor, a los profesores de literatura siempre nos agrada eso). Con la fecha en mente, haz la cuenta de cuánto tiempo tienes para leerlo.

3. Decide qué días dedicarás a la lectura y sé realista.

Con la fecha límite en mente, decide qué días puedes ponerte a leer. Quizás tengas que ir a tu clase de karate todos los lunes y miércoles después del colegio, por lo que no te sentirás con muchas ganas para tareas de literatura cuando regreses a casa. Elige los días de la semana que en verdad puedas dedicarte a esta actividad. Piensa que estarás leyendo alrededor de dos horas por cada día que le dediques. Este tiempo podría ser menor si es que eres un lector rápido, pero es mejor tener este margen libre por cualquier cosa que pudiera pasar. Si puedes dedicarle los martes, jueves y domingos a la lectura del libro y tienes 4 semanas antes de que tengas que terminarlo, tendrás 12 sesiones de lectura (3 por semana).


4. ¡Divide el libro!

Divide el número de páginas del libro entre la cantidad de días que tienes para leerlo. Supongamos que el texto que te ha dejado el profesor es de 250 páginas; si tendrás 12 sesiones de lectura, esto querrá decir que deberás leer 20 páginas por sesión (250/12= 20). También podrías hacer esta división por capítulos.

5. Elige tu lugar de lectura.

Recomiendo que leas en un estudio o un cuarto especial para ello, nunca en tu habitación y mucho menos en la cama. Hacerlo en tu propia recámara te dará un exceso de comodidad y podrías perder la concentración en la lectura; leer en la cama causa sueño, así que lo mejor es tener un lugar ventilado y tranquilo, con una silla o sillón cómodo.


Con esta planeación, podemos empezar la lectura. Continuemos entonces.


6. ¡Respeta tus tiempos!

Si ese día Juanito tu amigo te suplica que lo acompañes a ver a Marisol, la niña que le gusta, porque se pone nervioso y necesita de tu apoyo, dile que lo harás hasta que termines de leer. En serio, esto puede sonar duro, pero si tú no respetas tus compromisos, nadie más lo hará. Comprométete con tus sesiones de lectura. Lee siempre la cantidad de páginas o capítulos que te has propuesto. ¡Logra la meta!

7. Aléjate de la computadora y la televisión como de la peste.

Un clásico error de los estudiantes hoy en día es que realizan sus deberes con la computadora o la televisión prendida, lo que los lleva a ver su programa favorito, las redes sociales o el chat, ¡a hacer cualquier cosa menos a lo que se han comprometido! ¡Esto causa no hagas tus deberes a tiempo! Evita las distracciones, apaga tu televisión o la computadora y dedícate a leer.

8. Ten las herramientas a la mano.

Para una buena lectura necesitarás un diccionario, una pluma y tarjetas blancas o un cuaderno. El primero te servirá para buscar las palabras que desconozcas y así comprender mejor la lectura; las otras dos herramientas te servirán para anotar cosas que quieras recordar después.

9. ¡Utiliza las herramientas!

Si las herramientas están ahí, utilízalas. Una excelente recomendación es registrar el nombre de los personajes y una breve descripción de ellos: así no perderás detalles sobre la trama y cuando el nombre de algún personaje que no había sido mencionado durante muchas páginas aparezca de nuevo, tendrás una idea de quién es. También puedes anotar elementos importantes de la narración para que no los olvides; incluso puedes escribir tus propias opiniones sobre el texto (esto es algo que los profesores de literatura estamos muy interesados en escuchar).


El diccionario es una excelente herramienta para los lectores, ¡no dudes en utilizarlo! Si aún con los diccionarios te es difícil comprender una lectura, pide apoyo a tu profesor en cuanto lo veas de nuevo, seguramente estará gustoso en ayudarte (si no es así, siempre puedes mandarme un correo :P)


10. Al finalizar la lectura, relee tus fichas o apuntes.

Llega tu última sesión de trabajo y por fin has terminado el libro. ¡Es el momento de repasar! Da una revisión ágil a tus fichas para recordar elementos de la trama. Ve tus opiniones sobre el libro y considera si han cambiado. Este es tu momento de triunfo, ¡has terminado la lectura!

He aquí pues un método para realizar las lecturas para tu clase de literatura (aunque bien puede aplicarse a cualquier tipo de lectura). Espero que te resulte útil. Recuerda que debes sentirte cómodo al leer: no pienses en esta actividad como una carga, sino como una más de las cosas que realizas en tu vida diaria.

De cualquier manera, estoy siempre dispuesto a ayudar. Cualquier duda o comentario puedes contactarme a través de mi correo electrónico literatureandgaming@gmail.com o dejando un comentario en el post.

Si te agrada alguna otra de mis publicaciones o si quisieras que hable de algún tema, puedes hacérmelo saber por este medio.